MEDICINA GERMANICA
La Nueva Medicina Germánica se basa en los principios descriptos por el Dr. Ryke Geerd Hamer sobre las leyes biológicas. Este fantástico descubrimiento permitió entender, por primera vez y en forma concreta, reproducible y probada científicamente como son las reacciones del cuerpo frente a los problemas que se van presentando a lo largo de la vida.
El desarrollo de las leyes biológicas permite comprender la naturaleza del conflicto mediante el análisis de su expresión en el cuerpo. Por lo tanto, toda enfermedad es el resultado de una adaptación biológica que tiene un sentido.
La Nueva Medicina Germánica es la fuente de información que nos permite comprender la adaptación biológica (“enfermedad”), descubrir la naturaleza del conflicto que ocasionó tal adaptación, predecir la evolución y comprender que la unidad formada por nuestro cuerpo junto a nuestra mente y espíritu está participando en un proceso biológico que desea nuestra coherencia, salud y bienestar.
Es una medicina que cambia la forma de entender la enfermedad y se basa en las 5 Leyes biológicas descubiertas por el Dr. Ryke Geerd Hamer que explican la causa, el desarrollo y la curación natural de todas las llamadas “enfermedades”.
Estos descubrimientos comprueban que las enfermedades se originan en un conflicto biológico, representado por una situación estresante que no pudimos anticipar y para la cual no estábamos del todo preparados, por ejemplo: el término de una relación, un despido, la muerte de un familiar o un diagnóstico lapidario como “usted tiene cáncer”. Este conflicto causa un impacto a nivel cerebral, psíquico y orgánico, siempre siguiendo un patrón con pleno sentido y con el propósito biológico de resolver el conflicto que se enfrenta.
El Dr. Hamer hizo un mapa de todas las relaciones entre cerebro, órgano, síntoma y conflicto, por lo que se puede rápidamente llegar a orientar al paciente en la búsqueda de por qué su cuerpo se ha enfermado. En consecuencia, la terapia de NMG consiste en apoyar el proceso curativo sin interferirlo ni producir ningún daño, por lo que los medicamentos estarían fuera de esta medicina en la mayoría de los casos.
El terapeuta de NMG respetará que el único y verdadero “sanador” es el paciente, al que sólo ayudará a entender el proceso y a encontrar una solución a su conflicto. Al entender el proceso completo, se pueden anticipar y revisar complicaciones potenciales antes de que estas se tornen críticas. Con la NMG, se puede planear una intervención moderada y suave para disminuir la intensidad de los síntomas de curación, sin interrumpir el proceso. Con el paciente y terapeuta trabajando juntos como facilitadores de la Naturaleza, el proceso de curación puede ser para ambos un proceso hermoso y de afirmación de la vida.
Todas las enfermedades pueden ser tratadas con NMG: cáncer, diabetes, hipertensión, fibromialgia, resfríos, depresión, crisis de pánico y, lo mejor de todo, nos da una verdadera esperanza de sanación permanente, pues las enfermedades no son crónicas, ni autoinmunes ni genéticas y no necesitamos usar medicamentos ni depender de ellos de por vida para sanarnos.